El Pais, España. HÉCTOR E. SCHAMIS 2 JUN 2018 – 22:09 CEST Una fundamental lección del Holocausto es que el mismo fue posible por la existencia de un orden Estado-céntrico que permitía a los gobiernos tratar a sus ciudadanos como quisieran. Ocurría invocando la soberanía, una versión rígida de la misma. En la posguerra, el “Nunca Más” dejó sentado que reparar dichos crímenes y prevenirlos en el futuro requería modificar aquella concepción. Desde entonces, los gobiernos no pueden hacer lo que les plazca dentro de sus fronteras. Fue el comienzo de un movimiento global por los derechos humanos. Surgió así Seguir leyendo