Los estados Falcón, Lara, Táchira; Trujillo y Zulia suman más de 20 días de fluctuaciones y cortes de electricidad, diarios, prolongados y al azar. En algunas de estas entidades la medida es oficial; en otras, nadie ha dado la cara
«Los constantes cortes eléctricos en el estado Táchira pueden acabar con la vida de pacientes crónicos», denunciaba Fundaredes este 23 de marzo; dos días antes criadores de pollos de la entidad andina señalaban que la falta de electricidad afectaba la producción; mientras que pequeños comerciantes se las ingenian con baterías y plantas para mantener las santamaría abierta en el estado fronterizo, aunque aseguran que no es mucho el tiempo que puedan sostener esto.
En Lara la situación no es mejor, del 13 al 19 de marzo, los barquisimetanos pasaron 28 horas sin servicio eléctrico –sumando todos los cortes de la semana–, denunció el diputado a la Asamblea Nacional del 2015, Daniel Antequera.
El 22 de marzo la organización Activos por la Luz denunció, a través de sus redes sociales, que los cortes estaban pasando las cuatro horas diarias. Ahora no es solo el agua, también la luz. Ante esto hasta los representantes de la Iglesia pierden la paciencia: monseñor Víctor Hugo Basabe, administrador apostólico de Barquisimeto, llamó a las comunidades alzar su voz en disgusto ante la «precariedad en la prestación de los servicios públicos».
Cortes a tiempo de jornada laboral
Desde la segunda semana de marzo en los estados Falcón; Lara; Mérida, Táchira; Trujillo; Yaracuy y Zulia volvió el «Plan de Administración de Cargas»; es decir, cortes del servicio eléctrico. En algunas localidades la situación es dramática, la falta de energía eléctrica puede llegar a ser de siete u ocho horas diarias, de día y o de noche, sin horario; al azar.
El país potencia que no cuenta con el núcleo y motor de la vida moderna: energía eléctrica
La solicitud del mandatario Nicolás Maduro, quién el pasado enero indicó a las nuevas autoridades regionales que la prioridad para 2022 era la atención de los servicios públicos, no ha sido oída. Antes de los seis primeros meses de gestión los gobernadores de estas entidades pudieran calificarse como reprobados: las fallas en los servicios públicos continúan y se acentúan.
Los estados andinos, los más afectados
«La planta consume dos litros de gasolina por hora y cada litro cuesta 3.000 pesos ($0.79)», contó a La Nación Ferddy Marciani, dueño de una barbería en San Antonio del Táchira, quien ante los prolongados cortes eléctricos que se registran en la región desde hace unas semanas ha tenido que sortear la situación, para seguir trabajando.
De las diez horas que invierte en su trabajo, siete u ocho la pasan a oscuras, sin electricidad; apuntó.
Según el mandatario regional, Freddy Bernal la suspensión de la energía eléctrica en la región se debe al bajo nivel de agua en los embalses en los embalses Camburito y Uribante (Táchira).
Pero Marciani no cree en la tesis de que la falta de lluvia impide que los embalses trabajen a toda máquina. Para él se trata de un problema que data de hace 13 años, y lo que «busca es un control social, tenernos ocupados para que gastemos nuestras energías en sortear obstáculos».
La situación en la entidad, una de las más golpeadas por el chavismo, es crítica: los cortes llegaron hasta las zonas de seguridad de la frontera, donde antes poco se registraban. Los pacientes crónicos temen por el cumplimiento de sus tratamientos y los comerciantes y productores piden por lo menos un poco de certeza y seriedad, para poder trabajar.
El problema no es solo los cortes y su duración, también lo intempestivos y azarosos que son.
En Trujillo falta de electricidad afecta las ventas
Comerciantes de Trujillo indicaron a Fe y Alegría el pasado 24 de marzo tener una caída del 60% en las ventas de verduras debido a las fallas eléctricas.
«La falla de energía eléctrica y los problemas con los bancos están perjudicándonos más de la cuenta. Los sistemas de los puntos están caídos completamente o solo sirven un ratico», dijo Freddy Vargas trabajador del mercado Ciudad Bendita, Valera.
El municipio Valera el comercio se ha visto severamente perjudicado, indicó el periodista trujillano Wiston León. Cuando se corta la energía se pierde la señal, dejan de funcionar los puntos de venta y se generan largas colas y cierran los bancos.
León indicó que el servicio eléctrico se va al menos dos veces al día en bloques de cuatro horas, lo que se traduce en ocho horas sin electricidad.
También señaló a Fe y Alegría que no hay un pronunciamiento oficial respecto a los cortes eléctricos, ni de parte de Corpoelec ni de las autoridades municipales, regionales o nacional.
Lara morosos y no morosos entran en los cortes
«Si nosotros estamos pagando, entonces el servicio debe ser óptimo. Entendemos que anteriormente no lo estaban cobrando y había que calarse los apagones que habían, pero si ahora están cobrando entonces esto no debería estar ocurriendo», dijo a ElImpulsocom Jenny Armeya, quien se encontraba a las afueras de las oficinas de Corpoelec en Barquisimeto.
Pero en Lara morosos y no morosos entran en los cortes de electricidad («Plan de Administración de Cargas»).
Mientras, Miguel Gil contó al diario regional que con los «cortes» han dañado sus electrodomésticos. «Se me han quemado neveras, televisores, radios, se requiere que las autoridades tomen cartas en el asunto. Nos quitan la luz hasta tres veces en el día, todos los días. Difundieron un cronograma y no se cumple», dijo.
El pasado 24 de marzo el vicepresidente del Colegio de Ingenieros de Lara Julio César Gutiérrez denunció que «Lara está dependiendo de un 97% del Sistema Eléctrico Nacional, por eso hemos visto mayores cortes durante esta semana en el servicio energético».
Por otra parte, las ventas de bombillos recargables se han incrementado hasta en un 80% en la entidad.
Falcón a oscuras
El jueves 24 de marzo, pasadas las 8:00pm, una falla en la Planta Termoeléctrica Josefa Camejo, dejó a gran parte de la península de Paraguaná a oscuras (Falcón). Los municipios Carirubana, Los Taques y Falcón sufrieron por esta interrupción. La suspensión del servicio se extendió hasta la madrugada del viernes 25: a las 3:00 am fue cuando comenzó a restablecerse, paulatinamente, la energía eléctrica; reseñó La Mañana.
Los habitantes de este municipio del estado noroccidental no se habían recuperado de la falla del pasado 19 de marzo, cuando residentes de Buena Vista, Pueblo Nuevo, Cerro Cano, Adícora y El Vínculo estuvieron 24 horas sin luz, y debieron permanecer a oscuras nuevamente
Localidades de Falcón también atraviesa por cortes de energía, diarios y que la mayor parte del tiempo suman ocho horas.
Racionamiento en Zulia se refuerza en la madrugada
Las denuncias y quejas de los zulianos ante los cortes de energía eléctrica no cesan en las redes sociales; la mayoría reportan que padece el racionamiento dos veces al día, incluyendo durante la madrugada.
«Esta fue una de las peores noches de mi vida. No he descansado nada porque se me fue la luz desde la una hasta las cinco de la mañana; y para rematar, tengo que ir a trabajar. No sé si pueda trabajar bien hoy», testimonio del ciudadano Carlos Ferrer, reseñado por La Verdad.
«En el Zulia hemos pasado por racionamientos, fluctuaciones eléctricas, explosiones de subestaciones, apagones regionales y nacionales. En los 13 años que Venezuela tiene en emergencia eléctrica, en el Zulia nunca ha dejado de fallar la electricidad», recordó el 23 de marzo el coordinador del Voluntad Popular, Ángel Machado.
Mientras tanto Néstor Reverol, ministro Energía Eléctrica ha denunciado dos «ataques», en marzo, al Sistema Eléctrico Nacional (SEN), en la entidad.
Funcionarios del Gobierno se esfuerzan en mostrar imágenes, videos y hacen recorridos por espacios relacionados a la generación de energía en el país, para denunciar «ataques» y «faltas» –divinas y terrenales–, pero aun así muchos ciudadanos coinciden en que la razón es falta de mantenimiento y personal calificado. Otros apelan a su memoria y recuerdan a los Derwick.
Valentina Rodríguez Rodríguez| @valenntinus |Marzo 26, 2022 TalCual Digital.