Omitió referirse al cumplimiento de las fases comprobatorias necesarias para poder realizar tal declaración.
por Sabrina Martín 26 octubre, 2020 PanamPost
Mientras científicos de todo el mundo llevan más de siete meses luchando por lograr este objetivo, irónicamente el régimen de Nicolás Maduro anunció que «encontró una cura definitiva contra el virus».
El país, que atraviesa una crisis humanitaria sin precedentes y cuyas cifras oficiales carecen de credibilidad, supuestamente sería el pionero en hallar el tratamiento contra el COVID-19.
Si bien los científicos venezolanos están capacitados para desarrollar cualquier estudio, para afirmar que «ya existe una cura» es necesario cumplir con las diferentes fases comprobatorias, por lo que la aseveración de Maduro carece totalmente de veracidad.
Maduro afirmó que la molécula DR10, empleada como tratamiento contra la hepatitis C, el Virus de Papiloma Humano (VPH) y el ébola, sería capaz de «aniquilar al 100 %» el COVID-19. Según su relato, la molécula fue objeto de estudio por los científicos del IVIC (Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas) durante los últimos seis meses para constatar su efectividad como tratamiento contra el coronavirus.
El usurpador proclamó poner «los avances» a disposición de la comunidad científica venezolana, internacional, y hasta de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
De acuerdo con el doctor Julio Castro, médico internista infectólogo, es posible que algún científico venezolano identifique un medicamento que tenga actividad IN VITRO (en condiciones de laboratorio) contra el coronavirus; pero para que eso sea confirmado debe pasar por diversas fases de investigación, que pueden durar años.
#COVID19 Hilo explicativo. 2/4
Investigación medicamentos
1) Pasar por fases 1,2,3 ( tarda meses-años)
2) Miles de pacientes tratados .
3) Usar un protocolo científico riguroso.
4) Análisis de expertos independientes
5) Publicación científica de resultados
6) Normas éticas.— Dr. Julio Castro (@juliocastrom) October 26, 2020
«La distancia de una droga IN VITRO a una IN VIVO es como suponer que vas a ganar la serie mundial cuando cerraste el primer inning del primer juego con una carrera a favor. La ciencia debe prevalecer; en todas partes del mundo», aseveró.
Según lo expuesto por Maduro, el IVIC llevaría seis meses trabajando en dichos estudios; esta información contrasta con el hecho de que fue en agosto cuando anunció el inicio del procesamiento de muestras del COVID-19. ¿Cómo es que la tiranía anuncia que el IVIC lleva seis meses estudiando las muestras, si el anuncio se dio en agosto?
Cifras oficiales dudosas
A estas inquietudes se suma la desconfianza que existe sobre las cifras oficiales correspondientes al contagio debido a la falta de información y a la criminalización de la pandemia.
En Venezuela es imposible conocer el número exacto de contagios porque los pacientes no tienen a dónde acudir para realizarse la prueba.
El diputado José Manuel Olivares, quien hace seguimiento constante de la pandemia en Venezuela, dijo al PanAm Post que Maduro miente por una gran cantidad de factores; «en Venezuela no hay confianza, hay miedo y a eso se suma la falta de pruebas. Eso hace que el subregistro sea mayor que en otros países». Señaló además que «En Venezuela pudiéramos decir que más del 50 % de los casos no han sido registrados. Además es el país que menos pruebas PCR hace en América Latina».
Todo esto configura la razón de por qué en Venezuela el número no es real y demuestra que Maduro miente.
«Judicializando la pandemia»
Además los habitantes de Venezuela evitan testearse para no ser aislados por el régimen de Maduro en caso de dar positivo.
Afirma al respecto Olivares, «En Venezuela se está judicializando la pandemia; hoy en día los venezolanos tienen miedo de decir que padecen de coronavirus porque saben que pueden llegar a sus casas organismos armados como el FAES (Fuerzas de Acciones Especiales) o el SEBIN (Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional) para llevarte a un refugio por 15 o 20 días»
A esto se suma que debido a la falta de pruebas, los hospitales del país no admiten a personas con síntomas de coronavirus. Los pacientes mueren sin que se sepa si habían contraído el virus. Mientras tanto, el régimen de Maduro se niega a autorizar a laboratorios privados e instituciones académicas a realizar pruebas.
Por todo esto el registro oficial no ofrece, según los expertos, una fotografía aproximada del avance del virus en Venezuela.