Mientras Bonaire ordenó a Pdvsa vaciar los tanques repletos de fueloil, Curazao inició una demanda por falta de pago
Ante la imposibilidad de comercializar petróleo, el régimen de Nicolás Maduro mantiene tanques repletos de fueloil. No tiene cómo pagar el almacenamiento ni tampoco el mantenimiento de los terminales.
La agencia de noticias Reuters reveló que Bonaire ordenó a la estatal petrolera Pdvsa a vaciar los tanques y oleoductos en su terminal BOPEC.
Un comunicado de la Inspectoría de Medio Ambiente y Transporte (ILT) reveló que Pdvsa no ha realizado mantenimiento en los últimos años, generando riesgo de fugas.
El organismo también señaló que hay cinco tanques en la terminal llenos de fueloil, y que el techo flotante de uno de ellos tiene una fuga, lo que podría causar un derrame en caso de fuertes lluvias. Agregó que los muelles de la terminal están en tan mal estado que los barcos no pueden cargar ni descargar petróleo.
Como si esto no fuera suficiente, también se conoció que la Refineria di Korsou (RdK)en Curazao está demandando a Pdvsa por 51 millones de dólares en la corte del estado de Nueva York debido a que la estatal venezolana no ha realizado los pagos mensuales que establece el contrato. De acuerdo con RdK, Venezuela no paga desde principios de 2018.
«Los inventarios de crudo han atiborrado los terminales de almacenamiento, esto ha causado cierto pánico en la empresa estatal, ya que se ha tenido que recurrir a los barriles flotantes, es decir, a algunos tanqueros y súpertanqueros para depositar el crudo de exportación», informó en marzo una fuente de la industria petrolera al portal Tal Cual Digital.
A esto se suma que un informe de la empresa IHS Markit reveló que la producción petrolera del país suramericano podría llegar a cero si se mantiene la destrucción de la estatal Pdvsa y las refinerías del país.
La producción actual del país petrolero cayó a niveles de 1934, y todo indica que irá disminuyendo bajo el riesgo de llegar a cero. Venezuela actualmente produce entre 200.000 y 400.000 barriles por día (bpd).
Así como la producción petrolera se redujo, las exportaciones también disminuyeron; no solo por la decadente condición de las refinerías venezolanas sino también por las sanciones de Estados Unidos, con las que el Gobierno de Trump busca presionar la salida de Nicolás Maduro.
La tiranía culpa a las sanciones de Estados por la caída de la producción, pero desde 2016, antes de que Washington impusiera medidas, se registra el declive por años de desinversión y mala gestión.
En octubre de 2019 el régimen de Nicolás Maduro anunció que esperaba aumentar la producción petrolera a 1,6 millones de barriles diarios; otra promesa incumplida.
Sabrina Martín Ago 28, 2020– PanAmPost