Pedro Raúl Solorzano Por supuesto, no solamente los fertilizantes participan en esta crisis de nuestra agricultura, ya que situaciones similares de carestía y falta de oportunidad ocurren con los demás insumos para la producción, como son semillas de calidad, agroquímicos y otros. Recientemente hice un comentario en relación al arribo a Puerto Cabello de 160.000 sacos de fertilizantes NPK para el ciclo agrícola de este año 2017. Señalaba que eso, que parece una enorme cantidad de fertilizantes, solamente equivalía a 8.000 toneladas, y si se aplican 400 kg de ese fertilizante NPK por cada hectárea sembrada (kg/ha), alcanzaría para abonar Seguir leyendo