Gustavo Coronel Están sucediendo las dos cosas. En la TV y en el cine las imágenes se presentan a mis ojos con una velocidad tal que, cuando estoy pensando en asimilar la primera, ya me presentan la cuarta. La combinación en el cine de grandes imágenes que cambian con espantosa celeridad y un sonido que aturde a quien ya tiene un 37.5% de sordera en ambos lados, me ha obligado a usar tapones en los oídos y a cerrar los ojos, cuando estoy a punto del vértigo. Indudablemente mis 83. 6 años representan una buena parte de la explicación pero Seguir leyendo