Táchira está calmada pero tensa
Los pobladores fronterizos esperan que las autoridades den con los responsables de la muerte del profesor
Diputado Walter Márquez denuncia que hay atropellos desde hace tiempo y crímenes sin investigar. Walter Márquez rechaza que la investigación de la muerte de Orejuela esté en manos de un tribunal militar
La población fronteriza de Boca de Grita le ha dado un compás de tiempo a las autoridades del estado Táchira para esclarecer el asesinato del educador del sector Orope, Yofre Orejuela Madera, ocurrido el pasado domingo, según afirma el diputado de la Asamblea Nacional, Walter Márquez, quien sostiene que lo ocurrido en el territorio andino, ubicado frente al Puerto Santander (Colombia), durante el 30 de noviembre y los dos primeros días de diciembre fue una reacción popular que se inició a raíz de la muerte de este joven pero que también tiene otros antecedentes de atropellos.
Tal como cuenta el parlamentario, la población actualmente está tranquila pero en los pasados días hubo intento de tomar las instalaciones de la Guardia Nacional, se incendiaron dos gandolas que cargaban cemento y productos plásticos, y se retuvieron dos camiones de combustible de PDVSA para atravesarlos en la troncal 5 que comunica La Grita con Maracaibo.
De acuerdo con Márquez, la situación en ese momento se agravó cuando el gobernador del estado, José Gregorio Vielma Mora, declaró a los medios de comunicación que el hecho había sido un enfrentamiento con grupos paramilitares, “dando a entender que este joven fallecido estaba vinculado a los paramilitares y diciendo que esto formaba parte de la agenda del imperio norteamericano para apoderarse del Táchira, lo cual nosotros rechazamos de manera contundente”, apunta. Según la versión de sus familiares, Orejuela venía de una fiesta y en su traslado a Boca de Grita, a escasos metros de la policía, recibió un impacto de bala a corta distancia.
SITUACIÓN DELICADA Los ánimos de los pobladores se calmaron, según el diputado, luego de que ocurriera una reunión con la secretaria general de gobierno. “Pero la situación sigue igualmente delicada porque el comandante de la guarnición del Táchira ordenó que fuera un tribunal militar el que abriera las investigaciones, hecho que también rechazamos porque se trata de un delito penal ordinario y no penal militar. Además, la versión expresada por la secretaria general de gobierno es que en el sitio había 6 gandolas con combustibles, lo cual carece de veracidad porque por allí el cauce del río es muy profundo y el puente no tiene capacidad”, detalla Márquez. Asimismo asegura que hay una serie de atropellos que se han cometido en el Táchira con el argumento de combatir el contrabando. “A la población civil se le somete a muchos vejámenes. Se le quita un adorno navideño o una harina mientras que los grandes cargamentos pasan con la complicidad oficial. El año pasado también murió un joven en circunstancias muy extrañas, y en mayo de este año se cometió la masacre de La Fría. Todo este cúmulo generó una reacción muy fuerte el día domingo”.
Según Márquez existe la amenaza de que los pobladores puedan actuar a corto plazo si no se encarcela a los culpables del crimen de Orejuela.
REDACCIÓN. TalCual. País
Viernes 05 de Diciembre de 2014