CEMENTO ROJO: El tema de la baja producción de cemento en el país tiene demasiadas aristas entre la que más destaca la corrupción generalizada en los estamentos de la burocracia roja. Desde las luchas internas entre los sindicatos cementeros hasta las mismas luchas entre los militares que han controlado algunos de los puntos clave para la producción y la distribución del valioso elemento para la construcción de viviendas. En medio de estas luchas intestinas salió el tema de la destitución sorpresiva del general Barrientos, señalado "indirectamente" de excesivo burocratismo en un tuit personal de Maduro. Barrientos había destituido de la presidencia de Cemento Andino al ingeniero Crisanto Silva (ha circulado al frente de organismos relacionados con materiales de construcción como ese renglón y vidrio) y tras su salida del Ministerio de Industrias fue inmediata la restitución de Silva en el cargo cementero. Indicativo adicional de las divisiones y grupos que a cuchillo silente se enfrentan en el alto gobierno de Maduro. La edición Nº 1005 del semanario La Razón del 13 de abril titulaba así en su primera página: "Militares desvían el cemento". Allí mencionaba Orlando Chirinos, coordinador nacional de la Alianza Nacional de Trabajadores Cementeros como hubo un funcionario designado por el Gobierno que vendía cupos de cabillas y cemento siendo miembro de la directiva de Venezolana de Cemento. Cita igual en la entrevista que le hace el periodista Carlos Díaz que "se han visto funcionarios militares que desvían camiones que salen de la planta. El Gobierno sabe lo que está pasando allí". Nuestros consecuentes lectores pueden dar fe cómo a través de esta columna y mi portal he tocado ese tema desde que expropiaron y cambiaron los nombres a las anteriores empresas privadas productoras de cemento: Cemex de México es Venezolana de Cementos. La francesa Lafarge es Fábrica nacional de Cemento y la suiza Holcim es Industria Venezolana de Cemento. Chirinos enfatiza: "Esta unificación se realizó con grandes deficiencias operativas, de comercialización y laborales. Por ejemplo la gestión de Natacha Castillo (esposa del ex vicepresidente, ex ministro de Agricultura y hoy de exteriores Elías Jaua) dejó a Venezolana de Cementos en la destrucción total. Dejó una empresa deteriorada y eso tiene que investigarse y auditarse. "Ella se fue sin dar explicación alguna". Igualmente informa que la producción de cemento ha bajado a menos de 50% habiendo hoy más burocracia y menos diálogo con los trabajadores. En las fechas: 25 de septiembre 2008, 22 de febrero 2013, 8 de agosto 2013 y 8 de febrero 2014 denunciamos situaciones del sector que, de haberse tomado en cuenta, podían haber cambiado la realidad que hoy se sufre en el sector. Robolución en marcha…
Tomado de Runrunes de El Universal 29/04/2014