La dinámica política del país, en estos tiempos tan complicados, identifica en cada pronunciamiento de los actores políticos, al menos 2 exigencias básicas, que además de ser comunes a todos, son esenciales para poder abrir el camino hacia cualquier diálogo de paz: 1.- El desarme de los grupos violentos. 2.- El respeto y reconocimiento a la pluralidad política, que exige la no criminalización de la protesta. Esas dos condiciones son esenciales para que pueda prosperar la propuesta del Presidente Maduro de impulsar su Conferencia de Paz en Táchira, Mérida y Miranda[1]. En este sentido, el Alcalde de San Cristóbal, Daniel Seguir leyendo