La dirección político militar quedó fuera del texto.
A solo 17 días de la creación del Centro Estratégico de Seguridad y Defensa de la Patria (Cesppa), el Gobierno decidió eliminar de la Gaceta Oficial originaria los puntos más álgidos que causaron alerta en distintos sectores del país.
Con la reimpresión por "fallas en los originales" del documento, el pasado jueves, el Ejecutivo dio un paso atrás con los temas controversiales del organismo de seguridad.
Los cambios más emblemáticos se registraron en el artículo 3 del Decreto Presidencial Nº 458, en los que se excluyeron las terminologías de "enemigos internos y externos", así como la potestad de la institución de solicitar, organizar, integrar y evaluar las informaciones provenientes de instituciones privadas. También se eliminó la subordinación del ente a la Dirección Político-Militar de la Revolución Bolivariana, que ahora estará bajo los requerimientos del Presidente de la República.
Entre las otras variantes significativas se encuentran la desaparición de la facultad del organismo sobre las instituciones privadas en todos los articulados, hasta el punto que en el apartado 10 ya no aparecen dentro de las instancias que anteriormente estaban en la "obligación de aportar toda la información requerida". Este carácter de obligatoriedad ahora cambió a los términos de "prestar apoyo institucional" y va dirigido a todos los organismos públicos de defensa, inteligencia, seguridad y otros entes gubernamentales.
A pesar de los cambios, el artículo 9 sigue dejando en manos del director general encargado del Cesppa la facultad de "declarar de carácter de reservada, clasificada o de divulgación limitada a cualesquiera información, hecho o circunstancia", aunque se eliminó del texto la frase "que en cumplimiento de sus funciones tenga conocimiento" y se limitó su alcance a la información que "sea tramitada en el Cesppa, y que tenga interés estratégico para la seguridad de la nación". Aclaratoria que anteriormente no se encontraba expresa en el texto.
PRESIONES
A juicio del politólogo Miguel Manrique estos cambios se pudieron haber originado en el hecho de que la publicación del primer decreto "generó una gran alarma en la población, porque tocaba puntos muy álgidos para una sociedad democrática". Para él, el concepto de seguridad nacional posee un rango militarista que se vuelve "preocupante" cuando en su nombre se busca controlar el libre flujo de la información y la libertad de expresión.
El exdirector de la Escuela de de Estudios Políticos de la UCV cree que la presión de la opinión pública y el rechazo categórico que obtuvo en los sectores ligados a los medios de comunicación pudieron haber incidido en la decisión del presidente Nicolás Maduro de "rectificar" las implicaciones del Cesppa. Aunque aseguró que no le "sorprendería" que las críticas también se hayan originado a lo interno del chavismo.
"Yo no tengo ninguna duda de que dentro del proceso existen corrientes menos radicales y, en el medio del panorama electoral que se avecina, esta decisión pudo haber generado una repercusión negativa tanto en el electorado como en el seno de los partidos aliados del Polo Patriótico", expresó.
Sin embargo, el consultor de opinión pública José Vicente Carrasquero no cree que los cambios en el organismo de seguridad se deban a presiones internas, sino más bien a exigencias internacionales.
El profesor universitario aseveró que Maduro busca cuidar "la fachada constitucional" frente a su pares en la región, quienes estarían presionando al mandatario para que no asuma actitudes autoritarias.
Carrasquero afirmó que la primera publicación estaba "minada de errores que podían dejar al desnudo una intencionalidad autoritaria que solo demostraría aún más la situación de debilidad del Gobierno". Calificó la ratificación como "razonable", pues consideró que el Ejecutivo necesita disminuir las presiones internas frente a los problemas que se viven en el país.
Sobre las potestades que aún posee el Cesppa, Manrique pidió a la población seguir pendientes de sus implicaciones. "Es peligroso para la democracia centrar la inteligencia en un solo ente. La inteligencia lo es todo en un gobierno de corte militar. Roza todos los asuntos de la sociedad, y eso naturalmente es riesgoso para la democracia", dijo.