PAELLA PA’ L PERRO
Claudio NAZOA
Lo que van a leer a continuación es algo absolutamente cierto, insólito y espeluznante, algo que creo que sólo puede pasar en este país loco en el que vivimos.
Yo sé que hoy lunes da flojera ponerse a leer artículos, sobre todo el mío, pero creo que por primera vez, es importantísimo ver un pedacito de la torta del absurdo en el cual vivimos.
Tengo dos perros y por supuesto los alimento con comida de perro, la cual,este año, ha incrementado su precio en forma exorbitante. El saco grande de alimento para perro hoy ha cuadriplicado su valor si lo comparamos con lo que costaba en enero. Muchos dirán: “¡Pero este está loco!, con tanta cosa cara, y se preocupa por el alimento de los perros”. Es que ese no es el meollo de la cuestión. Sigan leyendo y se enterarán.
El saco grande de alimento, el normal, el más barato, es decir, el del perraje, cuesta 400 bolívares (en diciembre de 2012 costaba 90). De allí en adelante los precios subieron a 700, 900 y … hasta 1.200 bolívares. Lo arrecho de esta información, es que el gobierno obliga a los carniceros de los mercados populares venezolanos a vender en 25 bolívares la carne que asu vez ellos compran a 30 o más.
Si usted alimenta a su perro con bistec, le sale más barato que hacerlo con Perrarina. Saque la cuenta: 48 kilogramos de bistec cuestan 1.200 bolívares en los mercados libres, pero eso no es todo; antes yo ligaba la Perrarina con arroz picado, que es el desecho de cuando empacan el arroz en las arroceras. Eso era baratísimo pero cáiganse para atrás, ahora el arroz picado es más caro que el mejor de los arroces para el consumo humano.
Una galletica para entretener a los perros, antes costaba 5 ó 10 bolívares. Hoy cuesta 50 y 60 bolívares, o sea, es más cara que el ajo, la cebolla y el tomate ¿Qué quiere decir todo esto?, que en lugar de darles comida de perro a los perros, saldría más barato preparar una suculenta paella con arroz de primera, jugosos bistec y variados vegetales.
¿Quieren leer más locuras que nos parecen normales?: un botellón de agua de 5 litros cuesta 30 bolívares, con esos mismos 30 le pongo 300 litros de gasolina de alto octanaje a mi vehículo.
Otra cosa que por más que le doy vueltas a la cabeza no comprendo, es el precio del bacalao, que pescadores portugueses atrapan cerca de Polo Norte durante meses, para después salarlos, empacarlos y exportarlos al mundo entero, ¿saben cuánto cuesta el kilogramo? 190 o 200 bolívares, mientras que 1 kilo de pulpo que pescan en el mar que está detrás del cerro el Ávila o a lo sumo en el oriente del país, cuesta 220 bolívares ¿Qué vaina es esa? Así, gracias al socialismo del siglo XXI, podríamos seguir poniendo ejemplos de los precios absurdos de la economía distorsionada que hoy padecemos. Y yo me preguntó si algún audaz economista podría intentar explicarme esta demencia socialista que nos arruina, pero que sobre todo nos enloquece, ya que es imposible entenderla. ¿Cuándo vendrán a liberarnos los aviones que Henrique Capriles tiene en Colombia? Me dijeron que no han podido despegar porque en Colombia, la gasolina es muy cara, y están esperando que les llegue desde aquí por los caminos verdes.
¡Auxilio!