NARCOAVIONETA CON CABOS SUELTOS.
EL PILOTO DE LA UNIDAD BRILLA POR SU AUSENCIA
Falconianos aseguran que la gobernadora del Estado y el ministro El Aissami quieren proteger a alguien
KEILYN ITRIAGO MARRUFO
La captura de la narcoavioneta localizada el pasado fin de semana en el Cabo San Román de la Península de Paraguaná, que contenía 1.400 kilos de cocaína, se ha convertido en todo un cangrejo.
Mientras que las autoridades del estado Falcón se empeñan en acusar a los cinco funcionarios de la policía regional que intervinieron en el hecho, el resto de la sociedad falconiana manifiesta que se trata de un montaje para proteger a militares y personeros del Gobierno involucrados en el negocio de la droga.
Lo cierto, es que muchas preguntas aún quedan sin responder. La primera es: ¿Cómo una avioneta cargada de cocaína puede salir tan fácilmente de la base militar La Carlota? Algunas versiones aseguran que la unidad salió vacía y esperaba cargar la droga justamente en el Cabo.
José Ollarves, tío de Alexander Cuauro, funcionario adscrito al Centro de Coordinación Policial No.7 en Pueblo Nuevo, declaró que desde el 8 de agosto los funcionarios del BAE “estaban metidos en el monte, bloquearon la entrada de la trocha para que nadie entrara hasta allá. Ellos sabían de la operación, eran ellos los que custodiaban la avioneta, no los funcionarios de Polifalcón”.
No obstante, otro informante que no quiso identificarse, asegura que la avioneta salió cargada desde un principio y tenía como destino Aruba. “Cuando estaba pasando a la altura de Valencia presentó fallas en el motor y por eso se vieron forzados a aterrizar en una costa del estado Falcón, que era lo más cercano”, afirma, quien además asegura que pasaron el dato y un carro abordado por funcionarios del CICPC estaba esperándolos en la Península. “Ellos fueron quienes recibieron a tiros a los Polifalcón“, agrega.
Sin embargo, estos cinco funcionarios regionales resultaron imputados por estar inmersos en los delitos de porte ilícito de arma, asociación para delinquir y uso indebido de arma de fuego y tráfico. Familiares de los detenidos han marchado en protesta y sostienen que tienen pruebas de que los policías estaban de guardia en la comisaría de Pueblo Nuevo y acudieron al sitio porque se les notificó que una avioneta había aterrizado en horas de la noche sospechosamente.
La fuente anónima indica que la gobernadora del estado, Stella Lugo de Montilla y el ministro Tareck El Aissami llamaron al comandante Jesús López Marcano para pedirle que declarara en contra de los policías que estaban en el procedimiento o de lo contrario pusiera su cargo de director de la Polifalcón a la orden.
López Marcano, quien definitivamente abandonó el puesto, manifiesta que hasta ahora se desconoce dónde está la patrulla 294 “en la que iban nuestros policías, esa es una evidencia de que fueron atacados”, además de pedir que se verifique la grabación del 171 en la que funcionarios reportan la emergencia.
La comunicación entre los funcionarios del CICPC definitivamente deja mucha duda. A pesar de que el sitio estaba cercado por estos efectivos, no se sabe qué pasó con el piloto de la avioneta, ni con los tres vehículos que fueron incautados. El jefe regional de esta policía, Valmore Velásquez, fue removido de su cargo.
Tal Cual.18/8/11.Politica Pag 2.