Guiso sobre ruedas
Siguiendo instrucciones de su Jefe Máximo, el gobernador de Aragua implementó la Comuna Aragueña y autorizó, saltándose a la torera todas las barreras legales, la entrega de 1400 vehículos pertenecientes al gobierno a una empresa particular bajo la revolucionaria figura del Trueque
Por: Jesús Elorza
Siguiendo las instrucciones de su Jefe Máximo, el gobernador del Estado se decidió a implementar de una vez por todas la Comuna Aragueña y el primitivo Trueque como base de toda negociación.
A tal efecto autorizó, saltándose a la torera todas las barreras legales, la entrega de 1400 vehículos pertenecientes al gobierno a una empresa particular bajo la revolucionaria figura del Trueque. Repotenciación y Permuta fue el rimbombante nombre de la operación. El contrato se reducía a que la empresa repotenciara los vehículos y se quedara con un lote de unidades como pago.
La soberbia y la arrogancia llevó al gobernante a no considerar necesario que las diferentes instituciones gubernamentales hicieran un inventario de los vehículos que iban a desincorporar, ni esperar el informe de la Contraloría, ni la aprobación por parte de la CLEA y mucho menos proceder a una subasta pública de las unidades desincorporadas según la denuncia presentada en el Consejo Legislativo. Aquí mando Yo, la ley soy Yo. Les decía sonriente a las focas de su entorno.
Así comenzó el “Modus Cocinandi” de este guiso sobre ruedas y la empresa Eurotécnic-K c.a. fue la encargada de ejecutar la operación. A su vez subcontrata los servicios de Parking Car´s multiservicios para que participe en la repotenciación de los vehículos.
Hasta aquí el guiso se cocinaba a fuego lento y seguro. Pero una vez finalizado el trabajo de reparación los vehículos no fueron devueltos a los organismos gubernamentales, si no que los mismos comenzaron a ser vendidos a particulares por funcionarios del Instituto de la Policía del Estado Aragua.
Llegando al extremo que una ambulancia repotenciada y vendida a una persona, este trato de revendérsela a Corpo Salud detectándose que el referido vehículo era propiedad del organismo y no de un particular. El vendedor fue detenido y puesto a la orden del tribunal. En su defensa alegaba que el había comprado legalmente esa ambulancia y mostraba toda la documentación.
Los otros compradores, en su mayoría funcionarios gubernamentales acudieron a la Fiscalía para solicitar la guardia y custodia de los vehículos, pues aunque los mismos están siendo investigados, tiene como demostrar el pago y arreglos realizados al bien adquirido supuestamente en la sede de la Policía de Aragua.
El Fiscal 21 comisionado para el caso, le solicitó a los propietarios de los vehículos ponerlos a la orden del CICPC porque, según su criterio, esa operación de compra-venta no se había efectuado.
“Nos estafaron”, gritaron todos. Ahora pasamos de víctimas a victimarios. Quieren utilizarnos como chivos expiatorios de este descomunal guiso sobre ruedas.
A todas estas, el Chef de esta exquisita y gastronómica-estafa sigue tranquilo en su despacho esperando que su secretaria logre contacto con el Jurado de la Guía Michelín que otorga los reconocimientos internacionales a los mejores cocineros del mundo, para que consideren el otorgamiento del máximo galardón a su guiso.
En los días sucesivos un anuncio estremeció al mundo culinario. Los jueces del premio gastronómico decidieron ante el descomunal guiso sobre ruedas otorgar “El Pimentón de Oro” de manera unánime al gobernador. No hay que olvidar, argumentaron los jueces, que anteriormente este chef se había ganado las estrellas Michelín por su guiso con las notas estructuradas.