EL NACIONAL – Sábado 29 de Mayo de 2010 Opinión/6
Opinión
Los rayos de la luna
LUIS CHUMACEIRO
luischumaceiro@yahoo.fr
Queridos lectores, díganme si no es cierto; cualquier visitante inocente que vea televisión, lea un periódico o salga a caminar por estas calles sólo puede llegar a una conclusión: “A los venezolanos los están quemando los rayos de la luna”. Ejemplifiquemos.
Hace pocos días me alegré ante la noticia de una rebelión de los sindicatos y asumí que reaccionaban por fin ante el alto costo de la vida, los bajos salarios, el desconocimiento de su legitimidad o la negativa del régimen a suscribir los convenios colectivos; pero no, esa no era la causa, la protesta no es contra el régimen sino contra la MUD, por no haberlos incluido dentro de las candidaturas a la Asamblea Nacional.
Ese mismo día, la fiscala y la presidenta del Tribunal Supremo de Justicia acompañaron a un Chávez agradecido “por los consejos que siempre me dan” a inaugurar la “Universidad de la Seguridad” y, en ese escenario, se produjo el anuncio: “Las fábricas chinas son mucho más baratas”.
Parece que nadie sabe que los chinos esclavizan a los trabajadores. Prepárense los obreros, una fábrica china es idéntica al más brutal capitalismo del siglo XIX. Sin protección, sin condiciones de trabajo, con sueldos miserables; y ese es el modelo que asumiremos aquí.
Pero no contento con sus ingeniosas locuras, el responsable de la miseria del país echó un poco de gasolina a la tensión social que origina la violencia: “La riqueza del este de Caracas viene del dinero robado por los capitalistas”. En pocas palabras, el problema de la corrupción está radicado en zonas; imagino que en las lujosas urbanizaciones a las que se han mudado sus ministros y otros altos funcionarios, los mismos que se burlan de él en la intimidad de la camorra.
Pero busquemos otros casos. Con un pequeño retardo de 11 años, se instaló un Consejo Federal de Gobierno centralizador digno del Guasón.
Apartando el ridículo que hicieron ciertos personajes opositores ese día, lo más jocoso fue que el mismo verdugo de la descentralización anunció que buscará un crédito de 1 millardo de dólares para promoverla. Y a nadie le extraña que se soliciten préstamos en la cúspide de ingresos del fisco; y, además, se aproveche la oportunidad para hipotecar las reservas petroleras en el mejor momento de los precios.
No contento con sus logros del día anterior, en Charallave lanzó un plan de gestión prometiendo “la revolución del agua potable”.
Pero botó la bola cuando afirmó: “Hay gente de buena fe que cree que este gobierno no hace nada o que lo hace mal.
Les pongo el ejemplo del Guaire, lo recuperamos”; y dirigiéndose al ministro del Ambiente: “Parece que yo prohíbo que se hable de las obras. Estás peor que Diosdado… Somos bien malos”.
La tragicomedia nacional incluyó un elogio al suicida porque el hombre celebró la caída de 5,8% del producto interno bruto el primer trimestre de 2010 como el fin del capitalismo. Y por si faltara un ingrediente de cinismo, leí en un diario oficialista que “las cárceles del país se encuentran en total normalidad”. Exacto, el tráfico normal de armas, droga, corrupción y 500 muertos al año sin que exista la pena de muerte. Y en Estados Unidos, donde sí existe, no llegaron a 100 ejecuciones en el año 2009.
Finalmente, los zulianos están más lunáticos que de costumbre.
La Virgen de Fátima, en abierta competencia con nuestra Chinita, se les apareció; y un gorilita rojo devolvió a los deudos un cementerio que expropió, con la condición de que los muertos no se le sigan apareciendo…