III
1 Esos tiempos de Rafael Ramírez en Enagas.El plan era ambicioso aunque realista. Tejer Venezuela de una red de tuberías de gas, disminuyendo la dependencia del Guri y a la vez liberando combustible líquido y electricidad para la exportación. El programa se enterró con la subida de los precios de petróleo.
Hoy la situación es inversa. Se ha dejado de exportar electricidad. No hay redes de gas. Hay crisis eléctrica, y las plantas que se instalan en la emergencia, consumen el fuel oil que se iba a exportar. Tal vez sea cierto lo que dice el flamante presidente de Pdvsa: no habrá colapso eléctrico. Ajá, pero habrá menos ingresos y más gastos para Pdvsa.
2 Lo pernicioso es que Pdvsa está importando una pequeña cuota de fuel oil.
3 Tacoa trabaja a plena capacidad, abastecida por los buques de Wilmer Ruperti.
5 La crisis eléctrica le resultó excusa al Gobierno para bajar el ritmo a las empresas de la CVG. Lo dice un banquero de inversión, asesor del ministro Jorge Giordani: La reducción en la producción de las empresas básicas tiene un fin de corto plazo: reducir los flujos de caja negativos (contribuciones) que el Gobierno ha tenido que hacer para apoyar el déficit operativo de las empresas. Si bajas/reduces/cierras las líneas de producción no tienes que seguir contribuyendo al flujo de caja. Si paras las líneas de producción, tu futuro se vuelve negro. Esta es una medida de economía de guerra. Costos elevadísimos para el futuro”.
6 Nelson Merentes insiste. Todo bien con Giordani. ¿Y ese superdespacho para la supervisión bancaria? Antes en el BCV la voz de un técnico como la de Maximir Álvarez era más importante que la del superintendente de bancos. Los banqueros temblaban. De modo que el nuevo organismo no es para supervisar. Es controlar.
Juan Carlos Zapata